Ayer por tercer año consecutivo nos paseamos por el barrio de Malasaña para ver como 100 artistas decoraban libremente sobre cristales, muros, puertas de madera, suelos, bolardos y cierres metálicos de los locales del barrio en el evento «Pinta Malasaña», una acción de street art que nos sirve como excusa para pasear por las calles del barrio y ver en vivo y en directo como se desarrollan las obras.
Desde días antes se puede descargar en la web del evento el plano con las calles y puntos señalados en los que podemos encontrar a los artistas trabajando, y también las actividades complementarias al evento. Este año podías desde participar en un concurso de fotografía hasta ver como maquilladores de body painting interpretaban las obras en el torso de sus modelos.
Este año al revés que otros en los que madrugábamos más, decidimos ir alrededor del mediodía para poder ver las obras más o menos a punto de ser terminadas y sacar más fotografías del final, pero creo que los artistas no madrugaron mucho porque después de comer aún había muchas que ni si quiera habían empezado… así que pude sacar poquitas fotos.
Para comer fuimos a Superchulo, un vegetariano en el corazón de Malasaña que apuesta por la comida saludable y muchos colores en sus platos. En su carta puedes encontrar budha bowls de temporada, arroces y pastas, baos, hamburguesas vegetales, platos asiáticos como los sprint rolls o ramen vegetal…
Nosotros optamos por un «Picnic» para compartir, con hummus, pesto de tomate, guacamole, crema de queso y crudités, totopos y focaccia, y dos riquísimas pizzas a la piedra. Para aquellos que vais con niños muy pequeños tenéis opción a trona, y en el baño hay superficie suficiente para poder cambiar un pañal si es necesario 😉
Las peques se quedaron con ganas de tomar el postre, porque su carta dulce es toda una tentación, pero desde hacía tiempo quería llevarlas a Cookies & Dreams by Alma de Fuencarral, una de las dos tiendas de cupcakes y galletas de mi querida Alma Obregón. Las dos alucinaron con la variedad de sabores, pero tenían clara su decisión.
Martina no dudó ni un segundo en elegir un cupcake de unicornio al que ella misma colocó el cuerno, y Julieta fue feliz con una súper galleta de M&Ms de la que me dejó media miguita para probar…
Y hasta aquí nuestro paseo por Pinta Malasaña 2018 y nuestra ruta foodie 🙂 ¿Cómo ha ido vuestro fin de semana? Espero que tengáis un feliz lunes!
